Reynisfjara: La playa más famosa de Islandia

¿Qué es la Playa de Arena Negra de Reynisfjara?

La Playa de Arena Negra de Reynisfjara está muy cerca del pueblecito de Vík í Mýrdal, en la Costa Sur de Islandia. Su arena negra viene de lava que se enfrió, las columnas de basalto son trozos de lava solidificada con formas geométricas y los farallones de Reynisdrangar están rodeados de leyendas que le dan un aire mágico al lugar.

El color negro de la arena se debe a la actividad volcánica de la isla. Cuando la lava ardiente se encontró con el frío Océano Atlántico, se enfrió tan rápido que se rompió en miles de pedazos pequeños. Con el tiempo, esos fragmentos se convirtieron en la fina arena negra que ves hoy. Las columnas de basalto surgieron cuando la lava se solidificó y se fue agrietando formando estructuras casi perfectas.

Las historias locales hacen que los farallones de Reynisdrangar sean todavía más especiales. Cuentan que unos trolls trataban de arrastrar un barco a la orilla pero se convirtieron en piedra al salir el sol. Otra leyenda habla de un hombre que transformó a los trolls en roca para salvar a su esposa. No sé a vosotros, pero estas historias a mi me encantan.

¿Vale la pena visitar Reynisfjara?

Sin duda. En Reynisfjara se junta lo mejor de la fuerza y la belleza de la naturaleza. Su aspecto tan impresionante la ha convertido en uno de los escenarios de rodaje favoritos en Islandia. Allí se han grabado series y pelis como Juego de Tronos, Star Wars: Rogue One y Star Trek: En la oscuridad. Con la arena negra, las columnas de basalto y los farallones de Reynisdrangar, parece que estás en otro planeta.

Pero la playa no es solo famosa por el cine. La fuerza de las olas rompiendo en la orilla, el cielo cambiante y las vistas impresionantes lo hacen un lugar bastante incomparable. Si te mola la fotografía, el cine o simplemente explorar paisajes brutales, Reynisfjara te va a encantar.

Además, según datos recientes del gobierno islandés, Reynisfjara fue el cuarto lugar más visitado de todo el país en 2024, recibiendo a 445.355 visitantes.

Y por si fuera poco, al lado de la playa está el Black Beach Restaurant, un restaurante muy agradable que sirve sopas súper ricas y tiene un menú que te va a encantar.

¿Dónde está Reynisfjara y cómo llegar?

Reynisfjara está a unos 187 kilómetros (116 millas) al sureste de Reikiavik, lo que supone unas 2 horas y media de coche por la Ring Road (la Ruta 1), la carretera principal de Islandia. Desde la Ruta 1, coge la carretera 215, que te lleva directamente hasta el aparcamiento de la playa. Puedes alquilar un coche e ir por tu cuenta o unirte a un tour guiado por la Costa Sur; en cualquier caso, llegar es fácil. Además, el camino es precioso, rodeado de campos verdes, montañas escarpadas y paisajes de todo tipo.

Desde el parking, sólo tienes que caminar 1,3 kilómetros (0,8 millas) para llegar a la playa. El camino está asfaltado y no tiene complicaciones, así que es apto para todo el mundo. Mientras caminas, verás algunos paneles con fotos e información sobre la historia y las características de la playa.

Los peligros de Reynisfjara

Reynisfjara es increíble, pero también es famosa por sus “sneaker waves” u olas traicioneras. Aparecen de repente y avanzan mucho por la orilla, arrastrando a la gente mar adentro. Por desgracia, ha habido varios accidentes a lo largo de los años, y al menos seis personas han perdido la vida entre 2007 y 2024. Así que, sí, es realmente peligrosa. Mantente siempre lejos del agua y no le des nunca la espalda al mar para evitar sustos.

Consejos de seguridad

• No te acerques demasiado al agua; mantén cierta distancia de la orilla.
• Estate atento y nunca le des la espalda al mar; las sneaker waves pueden aparecer sin avisar.
• Sigue las señales y advertencias que haya colocadas; se actualizan según las condiciones del mar.
• No intentes nadar aquí; el agua está helada y las corrientes son fortísimas.
• No hay socorristas, así que tu propia prudencia es lo único que te protegerá. A veces la gente local advierte a los turistas que se acercan demasiado, pero no puedes contar siempre con eso.

Sneaker Waves

Las sneaker waves son olas enormes que pueden surgir sin previo aviso y meterse hasta zonas de la playa que parecían seguras. ¿Por qué pasa esto? Por la forma de la costa: el mar se vuelve muy profundo cerca de la orilla, así que las olas no pierden fuerza. Además, la playa tiene una pendiente bastante pronunciada, lo que hace que el agua retroceda con mucha potencia, creando corrientes que pueden tirar a la gente y arrastrarla hacia dentro. Como son tan impredecibles, lo mejor es mantenerse a distancia.

Mejor época para visitar Reynisfjara

La verdad es que Reynisfjara es preciosa en cualquier momento del año, pero la época en la que visites puede hacer que tengas una experiencia u otra. Por ejemplo, verano es la estación más turísticas. El promedio de visitantes en esos tres meses es de 56.000 personas al mes, mientras que en otros meses agradables como mayo o septiembre baja a 37.000.

• Verano (junio–agosto): Gracias al Sol de Medianoche, tienes luz casi todo el día, perfecto para explorar. Además, los frailecillos anidan en los acantilados, así que fíjate bien porque puede que veas algunos.
• Invierno (noviembre–marzo): La nieve sobre la arena negra queda espectacular, y tienes posibilidades de ver auroras boreales. Eso sí, las carreteras pueden estar heladas y las horas de luz son más cortas.
• Amanecer y atardecer: Estos momentos del día ofrecen colores alucinantes, y la arena negra refleja el cielo de forma increíble.

Si quieres visitar la cueva de Hálsanefshellir, ve cuando haya marea baja. En pleamar, la cueva suele estar bajo el agua o es difícil de alcanzar. Revisa los horarios de las mareas para no quedarte con las ganas.

Qué llevar cuando visites Reynisfjara

El tiempo en Islandia cambia en un abrir y cerrar de ojos, y cerca de la costa puede ser aún más extremo. Aquí van unos consejos:

• Ropa por capas: Así podrás ponerte o quitarte prendas según cambie la temperatura.
• Chaqueta impermeable y cortavientos: Para protegerte de la lluvia y del viento, que a veces sopla con mucha fuerza.
• Calzado resistente: El suelo puede estar resbaladizo. Unas botas o zapatillas con buena suela y que sean impermeables son la mejor opción.
• Gorro, guantes y bufanda: Aunque sea verano, nunca se sabe cuándo puede hacer un frío que pela.

Revisa siempre la previsión del tiempo antes de salir. Y, por supuesto, no olvides llevar tu cámara para inmortalizar el paisaje.

Qué hacer en Reynisfjara y en los alrededores

Reynisfjara no es solo un sitio para pasar corriendo y hacer cuatro fotos. Puedes pasar fácilmente el día entero disfrutando de la zona.

Admira las columnas de basalto

Fíjate en las columnas de basalto con forma hexagonal que hay en los acantilados. Son perfectas para sacar fotos chulas, y hay gente que se sube con cuidado a las más bajitas para ver las olas desde ahí. Yo no te recomiendo subirte, pero si lo haces, hazlo sólo un momento corto.

Visita la cueva Hálsanefshellir

Justo al lado de las columnas de basalto tienes la cueva de Hálsanefshellir, que por dentro también tiene esas formaciones rocosas tan geométricas. Si la marea está baja, puedes entrar y alucinar con la vista desde dentro.

Fotografía los farallones de Reynisdrangar

Los farallones de Reynisdrangar son un icono de la playa. Tienen una forma muy peculiar y están rodeados de leyendas. Tanto si te atrae la parte misteriosa como si simplemente te encanta el paisaje, son imprescindibles.

Observación de aves

En los acantilados de Reynisfjara anidan aves como los charranes árticos, los frailecillos (en verano) y otras especies. Si llevas prismáticos o un objetivo con zoom, podrás verlos mejor.

Explora Vík í Mýrdal

A pocos minutos está Vík í Mýrdal, un pueblecito con mucho encanto. Allí puedes comer algo, comprar jerséis de lana típicos de Islandia o simplemente contemplar las montañas y la costa desde puntos diferentes.

Acércate a Dyrhólaey

Un poco más allá de Reynisfjara se encuentra Dyrhólaey, un cabo con un arco de roca impresionante y vistas espectaculares de la Costa Sur. En días claros, incluso se ve el glaciar Mýrdalsjökull a lo lejos.

Conclusión

La Playa de Arena Negra de Reynisfjara muestra a la perfección el pasado volcánico de Islandia y la fuerza de la naturaleza. Entre su arena negra, las enormes columnas de basalto y los famosos farallones de Reynisdrangar, vas a encontrarte con un paisaje único… pero también con algunos riesgos que no hay que ignorar. Si planificas tu visita, te vistes bien para el clima y te mantienes prudente cerca del agua, podrás disfrutar de uno de los rincones más increíbles de Islandia. Ya vengas a sacar unas fotos o a pasar el día entero, Reynisfjara será, sin duda, uno de los puntos fuertes de tu viaje.